Una familia generativa
A partir de Majadahonda 1986 “Somos Familia”, hay mucho que se ha puesto en juego en la Familia Trinitaria, podemos percibir un antes y un después. Los Superiores Generales se han dado cita en Roma en mayo de 1987 para poner en práctica cuanto sugerido por la Primera Asamblea Intertrinitaria. En 1988 con ocasión de la Canonización de San Simón de Rojas la Familia Trinitaria tuvo un encuentro en Roma con el Papa San Juan Pablo II, 4/7/1988, el cual reconoció el camino emprendido: “La Familia Trinitaria hace vivo y actual el Carisma Trinitario”.
En septiembre del 1988 se celebró en Salamanca el “Primer Encuentro de Formación en Familia para Maestros y Maestras de Novicios”. Después de un proceso de años, en 1989 en Salamanca tuvo lugar el “Congreso Internacional del Laicado Trinitario” para consensuar el Proyecto de Vida del Laicado Trinitario, en el que sólo los laicos trinitarios tuvieron derecho a voto. En 1992 se llevó a cabo la Asamblea Intertrinitaria de Fusagasugá (Colombia) para América: “Haciendo caminos de esperanza”.
Otras señales generativas: A partir del 1986 comienzan las Ordenaciones de Trinitarios de Madagascar y se funda en la India. En 1988 se reconoce el Instituto de Ermitañas Trinitarias en Guayaquil (Ecuador). Las Monjas Trinitarias en colaboración, América y España, fundan un Monasterio en Tsiroanomandidy (1989), y las Hermanas Trinitarias de Valencia ponen pie en Antsirabé (1991). Algo nuevo está naciendo.
Iª Asamblea Intertrinitaria de Athis-Mons (París)
La IIª Asamblea Intertrinitaria, se celebró en Athis-Mons (18-24 de julio de 1993), cerca de Paris, en el contexto del VIII° Centenario de la Inspiración recibida por San Juan de Mata. Caminando se hace camino, los sueños y las esperanzas de Majadahonda se realizan: Se celebra la primera reunión del Consejo Permanente de la Familia Trinitaria (COPEFAT), así también se procede a la elección del Consejo Internacional del Laicado Trinitario (CILT), que aquí celebró su primera reunión. De ahora en adelante la Convocatoria de cada una de las Asambleas Intertrinitarias se hará con una Comunicación Oficial firmada por todos los miembros del COPEFAT.
En la declaración final toda la Asamblea se siente enviada para: Anunciar-Liberar- Celebrar. Con fuerza y claridad se afirma que la “Nueva evangelización exige, sobre todo, signos concretos de liberación”. La Asamblea se pregunta si “somos capaces de escuchar el grito del pobre, de nuestro hermano, de nuestro prójimo”. Esta pregunta puso las bases para la IIIª Asamblea Intertrinitaria de Ariccia (Roma 1999), con acento especial sobre los cristianos perseguidos.
Entre los gestos concretos se busca reavivar el espíritu de la “Tertia pars” para compartir los proprios bienes con los pobres y cautivos de hoy. Se evidencia una vez más el recuerdo y el deseo de volver a la espiritualidad de la “carta constituyente” de la Familia Trinitaria: la Regla de Juan de Mata, Evangelio vivido. Redescubrir nuestras casas como “Casa de la Trinidad”. A partir del VIIIº Centenario de la Inspiración el Mosaico (Icono) de Santo Tomás in Formis irradia una luz especial sobre toda la Familia Trinitaria.
El documento, en su Conclusión, habla del desafío del III Milenio: la Evangelización, que no la podremos jamás separar de la opción preferencial por los pobres, los excluidos y perseguidos. La Asamblea se clausuró en Notre-Dame de París con una Eucaristía presidida por Mons. Antonio Scopelliti.
Con ocasión de la Beatificación de Isabel Canori Mora, abril del 1994, el COPEFAT aprovechó para hacer su Estatuto especial. Y el Consejo Internacional del Laicado Trinitario (CILT) dedicó unos días para hacer su propio Estatuto especial.
IIIª Asamblea Intertrinitaria de Ariccia (Roma)
Muy cerca de la Ciudad Eterna, en Ariccia (Roma), se celebró la IIIª Asamblea Intertrinitaria durante los días 25-29 de agosto de 1999. En la semana anterior se había celebrado el Capítulo General Extraordinario. En 1998 se había celebrado un importante Congreso en Roma, del 16 al 19 de septiembre del 1998, centrado sobre la Regla Trinitaria: “La liberazione dei captivi tra Cristianità e Islam”. La celebración de los Centenarios VIII de la Fundación de la Orden y IV de la Reforma es un momento privilegiado. La Asamblea de Ariccia tiene como lema: “Familia Trinitaria…
¿escuchas tú el clamor de los cautivos?
San Juan Pablo II, en la audiencia el día 26 de agosto en Castelgandolfo, reservó a la Familia Trinitaria una acogida entrañable. El Santo Padre elogió el servicio carismático en pluralidad de formas, y animó a continuar atentos a los gritos de los nuevos cautivos. Aplaudió de forma especial el Organismo “Solidaridad Internacional Trinitaria” (SIT).
Una Asamblea que quiso comprometerse con hechos concretos “en favor del pobre y del cautivo”; con estos objetivos específicos: a) Apoyar la fundación de la Orden en Sudán; b)Reactualizar, en cuanto sea posible, en nuestros Institutos y Asociaciones, la “Tertia Pars”, según la Regla de San Juan de Mata, creando la “Caja de la Redención”; c) Asumir el Organismo “Solidaridad Internacional Trinitaria” (SIT) como una acción común y en comunión de toda la Familia Trinitaria; d) Crear y desarrollar una “Red Internacional de la Juventud Trinitaria para el respeto de los Derechos Humanos”.
Señaló la importancia de la Domus Sanctae Trinitatis et Captivorum, pues es en la experiencia de Dios Trinidad que aprendemos a escuchar el grito del esclavo y del pobre. Para lograr sus objetivos la Asamblea proponía unas estrategias concretas: a) A nivel local: Coordinarnos para programar oración, formación y obras caritativo-sociales, en común. Si es posible, en Familia; b) A nivel general, adherirnos a la acción de Solidaridad Internacional Trinitaria (SIT).
Y además la Asamblea invitaba: “Estamos llamados a caminar juntos, en el nombre de la Trinidad, sintiéndonos todos como verdaderos hermanos: los religiosos, las religiosas de vida contemplativa y activa y los laicos.
La Asamblea considera prioritarias estas exigencias: La aprobación pontificia del ‘Proyecto de Vida del Laicado Trinitario’; La elaboración de un programa general de formación para el Laicado; Que en cada una de las casas religiosas de la Familia Trinitaria se promueva el Laicado Trinitario, acogiéndolo y haciéndolo consciente de su propia responsabilidad; Que todas las Asociaciones del Laicado sean coordinadas y estén representadas en los Consejos Regionales e Internacionales (CILT).
También la Asamblea nos motivó acerca de la urgencia de la pastoral juvenil y vocacional diciendo: “Urge crear una pastoral juvenil y vocacional de conjunto y un equipo estable que coordine esta realidad”.
El nuevo templo dedicado a San Juan de Mata
El 7 de mayo del 2000 se inauguró el nuevo templo dedicado a nuestro Padre San Juan de Mata, obra de los arquitectos Alberto Ustarroz y Manuel Íñiguez. Presidió el solemne Pontifical el Señor Obispo de Salamanca y estuvo representada toda la Familia Trinitaria.
Aprobación del Proyecto de Vida del Laicado Trinitario (P.V.L.T.) en el 2000
El Procurador General, Fr. Luigi Cianfriglia, de grata memoria, presentó a la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada (CIVCSVA) el Proyecto de Vida del Laicado Trinitario (PVLT), y obtuvo la aprobación y confirmación del texto en italiano, el 15 de Noviembre de 2000.
Importantes Simposios y Congresos
Importantes los Simposios de Teología en Salamanca y los Congresos bienales en Granada, y señalamos el Congreso Internacional de Espiritualidad Trinitaria, celebrado los días 27-29 de diciembre del 2004, en la Casa General de las Trinitarias de Madrid. En cada una de las Asambleas Intertrinitarias se ha pedido potenciar y desarrollar la experiencia de Dios, Trinidad Redentora, vivir con más hondura la comunión y revitalizar nuestro característico estilo de vida de cara a la misión propia.
IVª Asamblea Intertrinitaria de México
Esta IVª Asamblea Intertrinitaria celebrada en Cuautitlán Izcalli (15 al 20 de agosto del 2005) estuvo iluminada por el lema Desde la Eucaristía, testigos del amor redentor. El lema sintoniza plenamente con el origen y la identidad del carisma trinitario redentor. El Papa San Juan Pablo II había proclamado entre octubre 2004 y octubre 2005 el Año de la Eucaristía marcado por el Congreso Eucarístico Internacional de Guadalajara.
Esta ha sido la primera Asamblea Intertrinitaria general que se ha realizado fuera de Europa, en América Latina; y que vio comprometida a toda la Familia Trinitaria Mexicana, religiosos/as y laicos trinitarios. Se deseaba impulsar el Laicado Trinitario de las naciones americanas. Las propuestas de la Asamblea se basaban en que el fortalecimiento de la Familia Trinitaria pasa a través de la oración, la fraternidad, la apertura a los jóvenes, la comunicación del carisma y la solidaridad.
Algunos objetivos de esta Asamblea
Después de veinte años de camino, entre gozos y esperanzas, se proponían los siguientes objetivos especificos:
1. Averiguar cuidadosamente el camino hecho en Familia, para llegar a una síntesis que nos permitiera lanzarnos con más pasión hacia la Trinidad y al servicio de los que hoy son oprimidos a causa de las nuevas pobrezas y esclavitudes. Por eso se preguntaba: ¿Qué hemos realizado de las propuestas de las Asambleas anteriores acerca del Estatuto de las Asociaciones, del Proyecto de Formación en Familia, de la atención a la Juventud, y de las obras caritativas-misericordiosas en común y en comunión? ¿Se ha cultivado en las Asociaciones el espíritu y la práctica de la “Tertia pars? ¿Cómo ha sido acogido el nuevo Proyecto de Vida del Laicado Trinitario (PVLT) aprobado por la Iglesia? ¿Cuáles son las luces y las sombras del Consejo Internacional del Laicado Trinitario (CILT)? ¿Se ha implantado el Laicado Trinitario en todas nuestras casas?
2. En segundo lugar, la Asamblea se proponía conectar con el contexto eclesial mexicano que celebraba el Congreso Eucarístico para reflexionar y profundizar con temáticas específicas, sobre su identidad y común misión carismática “inscrita en el corazón de la Eucaristía”, manantial del proyecto cimentado en la Trinidad y la Redención.
La clausura de la Asamblea tuvo lugar en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, con una Eucaristía presidida por el Cardenal Norberto Rivera, Arzobispo Primado de México.
Antequera, 01 de junio de 2022
Isidoro Murciego